Volando bajo

¡No me lo cuentes, dejame vivirlo!.

400 metros de altura, te tiras en picado, sientes el aire que golpea tu frente, te sientes libre,.... Solo un poco más.
300 metros, la sangre se agolpa en tu cerebro, te da tiempo a pensar en toda tu vida, sigues descendiendo a una velocidad vertiginosa.
200 metros, puedes ver el suelo, los arboles ytodo el paisaje con más detalle, te fijas bien en todo y decides que ya no quieres verlo desde tan cerca, que ya es suficiente, que no necesitabas saber como huele la tierra a 200 metros de altura.
Mientras piensas esto ya estas en los 150 metros de altura, te dices hay que remontar. Así que estiras las alas y te preparas para planear.
Pero, lo que no te esperas es ese golpe de viento que te azota tan fuerte y te dobla las alas.
Estás perdido..., lo sabes, vas a morir.
Y en el último momento, levantas la cabeza te esfuerzas y estando a 50 metros del suelo, empiezas a planear, a volar bajo, a sentir que eres como un pájaro. Te miras las alas y piensas que bien.
¿Alguna vez visteis a un pajaro mirarse las alas? ¿A que no?
Es que te viene a la cabeza cuando descubres un muro enfrente tuya.
Se acabó. Solo oyes un ¡Crash! y duermes...


Un saludo.